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¿Cuál es la parte más difícil para lograr un resultado y alcanzar un objetivo? Manuel Gil Pérez
¿Cuál es la parte más difícil para lograr un resultado y alcanzar un objetivo? Manuel Gil Pérez
Llegamos al último mes del año, para muchos se generan sentimientos encontrados entre esperanza y nostalgia, porque se convierte en un mes que tomamos como parteaguas para sacar un balance de lo hecho en todo el año y comenzar con los buenos deseos del próximo año.
Para muchos pudo haber sido un año extraordinario alcanzando grandes resultados superando incluso sus expectativas, para muchos otros pudo haber sido un pésimo año, en el que no solo no se alcanzaron las metas, sino que se retrocedió en el tiempo y logros.
¿Cuál es la diferencia entre lograr las metas y quedarse sentado pensando que no fue posible?
Conforme avanza el tiempo y las acciones que cada uno hace para lograr sus propios objetivos, va aprendiendo que la vida se rige por reglas y leyes naturales que nos aplican a todos y que debemos aprender a conocerlas, al igual que a nosotros mismos, para poder establecerlos claramente junto con metas alcanzables y medibles que nos permitan evolucionar por etapas.
Los objetivos y metas que nos vamos poniendo tienen que estar alineadas a nuestro propósito de vida, la mayoría comenzamos con proyectos e ideas de acciones que nos desvían de ese propósito pensando que por ser una buena idea se va a realizar de una manera "sencilla” olvidando que existen las reglas y principios de la vida que se encargan de darnos la mayoría de las veces lecciones muy duras.
Si imaginamos que nuestro objetivo es poder escalar las montañas más altas del mundo, tendremos que plantear la meta y acciones para determinar por donde comenzaremos.
La parte más difícil de escalar de una montaña se le determina "escarpe” que suele ser la parte más empinada y tener la pendiente más fuerte en altura.
Si mi intención es escalar la montaña y comienzo con cierta planeación, ideas, algo de entrenamiento, me rodeo de personas que me animen y motivan, pero no me preparo física, mental y técnicamente para saber todo lo que se va a enfrentar la probabilidad de fracaso es muy alta.
Eso es lo que nos pasa a la mayoría cuando comenzamos con algo en mente, creemos que solo por pensarlo y que se nos ocurrió es una buena idea y la vamos a poder realizar con ciertos retos, nada que no se pueda resolver.
En realidad, es mucho más complejo de lo que se dice, precisamente porque se involucran muchos factores para alcanzarlas:
- La determinación es un primer elemento que se tiene que sumar y que es de donde se debe de partir una vez que se tiene el objetivo y meta (siempre alineados a nuestro propósito de vida, si no será una lucha inalcanzable). Esta disposición física y mental para poner nuestra mente y cuerpo en un estado de lograr y concluir nuestro objetivo.
- La proactividad es un segundo elemento que debemos de considerar para poder tomar la iniciativa, control y responsabilidad de nuestras acciones, también nos servirá para tener la capacidad de enfrentar problemas, buscar activamente oportunidades y adaptarnos a nuevas situaciones aprendiendo de nuestros errores.
- La procrastinación es un elemento que comienza a aparecer conforme la pendiente se hace más empinada y la altura de los problemas empiezan a cortar el oxígeno, es cuando uno empieza a sentir que no avanza, que se desgasta y que cada paso que se da, es más difícil que el anterior, por lo tanto se empieza a perder el "motivo” para hacerla, se vuelve algo que se puede posponer.
La mayoría de las veces no nos damos cuenta de que nuestros objetivos y metas "pequeñas” se vuelven parte de nuestra vida, son los "hábitos” que día a día nos forman y en ella se determina mucho de lo que se requiere para poder saber si vamos a poder voltear a ver objetivos y metas más grandes.
¿Dónde radica la trampa?
En que confundimos que, por nuestro conocimiento actual, "trabajo” y logros vamos a poder alcanzar lo que nos propongamos sin una preparación adecuada, un entrenamiento y los elementos mencionados.
En realidad, el ejercicio que te invito para cerrar este año y hacer una buena planeación del que viene es que puedas voltear a ver hacia atrás y hagas una lista de cuántos objetivos y metas que determinaste a lograr, que no hayan sido una instrucción laboral o un acuerdo familiar, sino que haya sido tu objetivo y meta personal, por ejemplo, aprender otro idioma, tener mejor salud, mejorar tus finanzas, cultivar más amigos, tener una mejor relación y espacios con Dios y tu familia.
Una vez que tengas la lista (seguramente muchos de esos objetivos y metas fueron también pensados durante las 12 uvas de fin de año pasado), apunta cuántos fueron logrados este año, con eso podrás tener una referencia del porcentaje de veces que te has determinado y has cumplido tu palabra.
Sin temor a equivocarme, creo que es lo que hoy requerimos más en general, saber ponernos metas a corto, mediano y largo plazo que sean alcanzables en proceso de evolución constante de manera personal, que se sepa que hay un proceso natural de vida que si se toman atajos, es cierto, se pueden evitar las partes difíciles de las montañas, algunas veces, pero que la vida si o si nos expondrá no en una sino en varias ocasiones a esas etapas del "escarpe”, lo difícil es cuando cambias de objetivo y meta cada vez que se te presenta una etapa asi, porque se vuelve entonces una vida sin rumbo.
Analiza que tan bien tienes tus objetivos, metas y acciones y pase lo que pase, así sea muy difícil, determínate a lograrlos con toda la proactividad que puedas infligirle a tu vida.
Mis mejores deseos para estas fiestas navideñas, que la paz reine en tu hogar y que el próximo año sea de mucho éxito para todos los que asuman la responsabilidad de su vida.
Manuel Gil Pérez
Hombre de familia y exitoso empresario en modelos innovadores de comercialización de productos de salud y bienestar. Dirige un equipo de emprendedores que han consolidado con éxito sus procesos comerciales a través del desarrollo de Liderazgo Transformacional cimentado en valores.
Instructor, conferencista en temas de desarrollo humano, liderazgo y bienestar y colaborador editorialista del Portal Líder Ejecutivo MX.
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