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Crisis energética ¿Cómo llegamos hasta aquí? Jorge García Valladares
Crisis energética ¿Cómo llegamos hasta aquí? Jorge García Valladares
¿Por qué la eficiencia y calidad de energía eléctrica no ha sido una prioridad para las empresas en México?
México enfrenta una etapa crítica en su sistema eléctrico. La demanda crece, la infraestructura nacional muestra claros signos de saturación, y los eventos de inestabilidad se vuelven cada vez más frecuentes. En este contexto, resulta preocupante que muchas empresas aún no hayan incorporado la eficiencia y calidad de la energía eléctrica como parte central de su estrategia operativa.
Históricamente, el acceso relativamente estable y económico a la electricidad llevó a las industrias a asumir que el suministro estaría garantizado. Sin embargo, esa visión ya no es sostenible. Hoy, las empresas que no optimizan su consumo energético enfrentan riesgos tangibles: interrupciones operativas, daños a equipos, pérdidas económicas y sanciones regulatorias por exceso de demanda o por no cumplir con normas de eficiencia energética.
Entonces, ¿por qué seguimos esperando?
La falta de una cultura de gestión energética es uno de los principales factores. En muchas organizaciones, los temas eléctricos siguen siendo vistos como un asunto técnico exclusivo del área de mantenimiento, en lugar de una responsabilidad estratégica de la alta dirección. No se miden variables clave, no se analiza la calidad del suministro y, en consecuencia, no se detectan ni se corrigen pérdidas que impactan directamente en la productividad.
Los líderes industriales deben hacerse preguntas urgentes y profundas:
¿Dónde estamos realmente parados en materia de gestión energética?
¿Qué tan preparada está nuestra planta para enfrentar escenarios de inestabilidad eléctrica?
¿Cuánto estamos perdiendo hoy por no medir, ni corregir?
La transformación energética no se trata solo de adoptar energías renovables; empieza mucho antes, con una decisión crítica: dejar de asumir que todo funciona y empezar a medir, diagnosticar y optimizar. No se puede mejorar lo que no se mide, y en un entorno eléctrico cada vez más complejo, no medir es exponerse innecesariamente.
El momento de actuar es ahora. La eficiencia energética ya no es una opción competitiva: es una necesidad operativa. Ignorarla es asumir el riesgo de quedar fuera en un entorno cada vez más exigente.
Porque en el futuro energético que viene, solo será para las empresas que hoy decidan cambiar. La adaptación ha iniciado.
Jorge H. García Valladares
Es miembro senior y fundador del capítulo Yucatán de la IEEE. Fue presidente de FECIME y del Colegio de Ingenieros Mecánicos Electricistas de Yucatán (CIMEY), presidente fundador de la Asociación Yucateca de Constructores Eléctricos (AYCE) y miembro de la XIX comisión ejecutiva de la Unión Mexicana de Asociaciones de Ingenieros UMAI.
Ha fungido como tercero especialista de ASEA en sistemas de seguridad comercial y como perito en ingeniería mecánica eléctrica del PJF. Es tesorero de ASME sección México, miembro del consejo consultivo de FECIME, Tecmilenio, casa segura (de alcance nacional) y de la Asociación EXATEC Yucatán.
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