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Surge un nuevo desafío para la ciberseguridad educativa. Rodolfo Galué Absalón
Surge un nuevo desafío para la ciberseguridad educativa. Rodolfo Galué Absalón
Del "Rincón del Vago” a un Nuevo Desafío para la Ciberseguridad Educativa
¿Recuerdas el sitio "El Rincon del vago" que ayudaba a estudiantes poco comprometidos con sus estudios, pero ávidos de ayuda para elaborar tareas con el mínimo esfuerzo?, ahora imagina el reto que actualmente tienen los maestros para detectar por parte de sus alumnos el mal uso de la Inteligencia Artificial (IA), o cómo impactará el uso de la inteligencia artificial en la ciberseguridad de las instituciones educativas y qué riesgos y vulnerabilidades se generan a partir de su uso.
Vivimos en una época muy distinta a la que vivieron muchos hace apenas 10 ó 15 años, una en la que la IA está cambiando por completo la forma en que estudiantes y maestros interactúan. Con ello vienen retos mucho más complejos, tanto para la honestidad académica como para la seguridad digital en las instituciones educativas.
Ahora, en lugar de copiar tareas mal hechas de ese famoso sitio, los estudiantes tienen a su entera disposición, herramientas de IA capaces de redactar textos, resolver difíciles problemas matemáticos en cuestión de segundos.
Las herramientas como GPT pueden redactar ensayos completos y bien estructurados con apenas unas cuantas indicaciones. El resultado: trabajos que parecen ser obra del propio estudiante, pero que en realidad son productos de algoritmos entrenados con enormes cantidades de información.
Esto representa un enorme reto para los maestros. ¿Cómo pueden saber si el trabajo entregado es realmente del estudiante o si fue generado por una IA? Los métodos tradicionales para detectar plagio se están quedando obsoletos frente a estas nuevas tecnologías. La frontera entre lo que es un trabajo auténtico y lo que ha sido creado por un software se está desvaneciendo. Los maestros además de enseñar también tienen que convertirse en Sherlock Holmes, analizando patrones de lenguaje o buscando incoherencias para descubrir quién es el verdadero autor detrás del texto.
Lo antes mencionado no es el único problema que nos regala la IA al ámbito educativo. Mientras los profesores intentan mantener la honestidad en la elaboración de trabajos académicos, las instituciones educativas afrontan peligros de mayor envergadura
Piensa en lo siguiente: una IA bien programada puede identificar patrones de acceso y seguir la actividad en la red, lo anterior en manos equivocadas, puede ser usada para atacar de manera efectiva a sistemas educativos. A manera de ejemplo, un estudiante con conocimientos técnicos podría usar IA para acceder a bases de datos con calificaciones, datos personales de otros alumnos, e incluso información financiera de la institución. Existen muchas escuelas que no cuentan con sistemas de seguridad adecuados a esta nueva realidad, por lo que estas vulnerabilidades se vuelven aún más preocupantes.
No todo son malas noticias, las instituciones pueden aprovechar la IA para mejorar su seguridad. Existen soluciones comerciales que integran inteligencia artificial y que son capaces de detectar intrusiones, identificar comportamientos anómalos en las redes y alertar sobre posibles ataques en tiempo real, bloqueando accesos no autorizados antes de que causen daño. Sin embargo, debemos reconocer que implementar estos sistemas puede ser costoso y requiere de personal capacitado que muchas instituciones educativas no pueden pagar.
El uso indebido de la IA por parte de estudiantes para sacar ventaja en lo académico es solo una parte del problema. Los riesgos más graves se relacionan con la integridad de los activos de información de las instituciones. Las brechas de seguridad pueden resultar en ataques de ransomware, robo de datos y violaciones a la privacidad de miles de personas.
El futuro de la ciberseguridad en el ámbito educativo dependerá de la rapidez con la que las instituciones puedan adaptarse a este nuevo escenario. Esto implica no solo adoptar herramientas avanzadas de protección, sino también capacitar y concientizar constantemente a sus estudiantes, personal académico y administrativo sobre los riesgos que conlleva el uso de la IA, y cómo emplearla de manera ética y responsable.
Así como El Rincón del Vago representaba un gran atajo para los estudiantes, la IA está ofreciendo atajos mucho más efectivos, pero también más peligrosos. La IA es una herramienta poderosa, pero, como cualquier herramienta, su mal uso puede tener consecuencias destructoras. Las escuelas podrían encontrarse con que su mejor aliado en el aula se ha convertido en su mayor enemigo en el ciberespacio, si no se toman las medidas necesarias.
Rodolfo Galué Absalón
Director General de Lumtux
Rodolfo Galué Absalón es un profesional con más de 20 años de experiencia en la gestión de proyectos tanto en el sector público como en la iniciativa privada. Su formación como informático, complementada por dos maestrías en Dirección de Proyectos y Docencia, junto con varias certificaciones internacionales, lo avalan como un experto en su campo. Se especializa en planeación, seguridad de la información y gestión de proyectos, siempre con un enfoque en la innovación.
Además de su carrera profesional, es un entusiasta de la tecnología y la carpintería, intereses que complementan su enfoque práctico y detallista en los proyectos que lidera. Su filosofía de trabajo, "Sin prisa, pero sin pausa", refleja su enfoque constante y meticuloso para lograr objetivos.
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