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¿De qué te alimentas? Manuel Gil Pérez
¿De qué te alimentas? Manuel Gil Pérez
La calidad de vida de los mexicanos y en general de todo América Latina y a nivel mundial se ha visto fuertemente afectada por la cantidad de enfermedades originadas por nuestro estilo de vida y entorno, lo que ha ocasionado literalmente una pandemia y reto para las instituciones de salud y los expertos en la materia.
Sin embargo, no solo las instituciones de la salud se han visto retadas. Para la parte empresarial, las faltas o baja producción por enfermedades es un componente cada vez más a considerar con los compromisos de las metas, ya que las horas hombre, productividad y eficiencia se ven directamente afectadas con los compromisos ante los clientes.
Para la parte del trabajador empleado, también se vuelve un entorno difícil considerando los aspectos al interior de la familia, el significado de una enfermedad de una persona productiva hace que se disminuya la calidad de vida integral, adicional a la afectación económica. El gasto de un mexicano en una enfermedad en las consultas, más medicamentos y adecuación de su alimentación hace que se vuelva una carga pesada respecto al ingreso promedio de su salario.
Los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), respecto al gasto corriente del Gobierno Mexicano en salud representó el 6.08 del Producto Interno Bruto (PIB) en el año 2021.
La estadística en el mismo año, para la esperanza de vida en México al nacer, bajo del año 2000 de 64.6 años, al año 2021 de 61.4 años. En resumen, en 11 años se ha reducido la esperanza de estar sanos 3 años más.
Con estos antecedentes, el mayor desafío que tenemos todos los mexicanos es aprender a tener una salud integral, lo que comemos, lo que escuchamos, lo que leemos, las personas con las que nos rodeamos, entre otras tantas.
Las enfermedades originadas por la calidad de los alimentos que consumimos y el nivel de estrés en el día a día, hace que dos de las hormonas más importantes en nuestro organismo se activen desproporcionadamente, generando la mayoría de los problemas en el cuerpo y de las enfermedades hoy conocidas, entre ellas la diabetes tipo 2, depresión, por mencionar algunas.
¿Existe alguna esperanza de mejorar el rumbo y la estadística?
En mi opinión si y se puede lograr a través de la sensibilización primero de nosotros como responsables de nuestra salud, entendiendo que muchas veces preferimos gastar más en un equipo de telefonía o un vehículo y su mantenimiento, que ir con especialistas de la salud como un nutriólogo o médico para prevenir.
Pero también se hace evidente y necesario que los funcionarios públicos, empresarios y líderes en sus comunidades, tomen la misma responsabilidad de fomentar foros, pláticas donde se puedan promover espacios de educación y talleres que den opción aprender a cuidarse, más allá de los establecidos como obligatorios por las leyes.
¿Vale la pena el esfuerzo de la inversión?
Aunque para muchas empresas y líderes esto se considera un gasto y los empleados se vuelven simplemente mano de obra o número más, se descuida el costo de la baja productividad por salud y por incapacidad.
El trabajo con grupos de personas se puede hacer más eficiente, optimizar y multiplicar cuando todos cuentan con los conocimientos, habilidades, entorno adecuado y condición de salud para lograr metas más altas y es cuando pasamos a tener equipos de alto desempeño, que son los ideales en todas las organizaciones.
Las condiciones físicas de las personas y la salud están directamente proporcional al compromiso de los resultados.
Tenemos todos el compromiso de mejorar nuestra calidad de alimentos, de documentarnos y tener mayor información que nos permita tomar mejores decisiones y por consecuencia vivir mejor.
¿Es difícil?
Si. Igualmente nos costará hacer sacrificios, pero tenemos que darnos la oportunidad todos de probar como cambian nuestra realidad y lo bueno que puede ser, nos podemos acostumbrar a tener un mejor estilo de vida.
Solo tenemos que decidir, ¿Cómo queremos vivir?, nadie puede tomar las decisiones por nosotros, tenemos que asumir la responsabilidad de nuestra condición actual.
Manuel Gil Pérez
Hombre de familia y exitoso empresario en modelos innovadores de comercialización de productos de salud y bienestar. Dirige un equipo de emprendedores que han consolidado con éxito sus procesos comerciales a través del desarrollo de Liderazgo Transformacional cimentado en valores.
Instructor, conferencista en temas de desarrollo humano, liderazgo y bienestar y colaborador editorialista del Portal Líder Ejecutivo MX.
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