El sueño de muchos Líderes Ejecutivos es tener su propia empresa para poder trabajar en lo que realmente les apasiona, sin tener que rendir cuentas y con la libertad de no tener que cumplir con un horario estricto.

Emprender no es tarea fácil, sino se cuenta con el capital necesario para hacerlo; por esta razón muchos optan por emprender siendo empleados. Tener un empleo con una estabilidad económica, fines de semana libres y días de descanso al año y al mismo tiempo comenzar tu negocio.

Hacerlo tiene como todo, sus ventajas y desventajas.

• No tienes la presión económica de tener ingresos inmediatamente.
• Te permite tener una transición suave para entender y acoplarte al nuevo proyecto profesional.
• La experiencia profesional que adquieres en una empresa antes de emprender puede ser de gran ayuda para las diferentes tareas que te esperan.

Sin embargo,

• El tiempo se puede convertir en uno de tus más grandes obstáculos, para poder realizar tus labores como empleado, emprendedor, tiempo para tu familia, amigos, etc.
• Además, podría tardar más tiempo en arrancar tu negocio sino estas al 100%.
• Si no eres organizado, puedes afectar seriamente el desarrollo de tu proyecto y/o el de la empresa para la que trabajas.
• Convencer a los inversionistas para entrarle a tu proyecto en el cual no puedes dedicarle 100% puede llegar a ser mucho más difícil.