Hace 45 años, a mis 18 años, mi tío político Don Francisco España Orozco, me invitó un café. La intención era preguntarme ¿qué había decidido estudiar?  Al escuchar mi respuesta, me dijo, te recomiendo que  elijas la carrera de CONTADOR PÚBLICO, porque tiene mucho futuro, y porque nunca te va a faltar trabajo. Ya el éxito profesional dependerá de tu esfuerzo. No tengo dudas que te irá bien. Le hice caso al tio.

La profesión contable es mucho más que llevar cuenta y razón de las operaciones de los entes económicos, y de preparar estados financieros. Es mucho más que ayudar al cumplimiento de las obligaciones fiscales de los contribuyentes. Es una oportunidad de satisfacer la necesidad de orden, control y de información financiera de las empresas privadas y los entes públicos. Es la oportunidad de contribuir al desarrollo económico y social de la comunidad, al estado y al país en el que se reside. Es una profesional que da la oportunidad de ganar un ingreso  digno y suficiente para solventar el costo de la vida familiar  y mucho más, dependiendo de la capacidad y el esfuerzo personal de cada quien.

Ser contador es un privilegio y una gran responsabilidad ética.  Por todo ello: muchas felicidades a cada uno de mis colegas, en especial, a mis gran equipo de trabajo, lidereado por mis  extraordinarios  socios: la CP Claudia Olivia Hidalgo Solano y por CP. Luis Perez Meza. Así, como a Luz Góngora y a Diana Gonzalez, nuestros estupendos gerentes de Contabilidad y de Fiscal, respectivamente. 

Muchas felicidades a cada uno de mis ex alumnos, que se han convertido en contadores comprometidos con su profesión y que están orgullosos de su alma mater, la UV.

Feliz día del contador 

Edgar Hernández Cancino Quintero