La empresa evoluciona. Todo cambia

La empresa evoluciona. Todo cambia

 
Una empresa es un sistema abierto por definición, está en continuo intercambio con su entorno, con otros sistemas sociales y económicos; detecta las necesidades del mercado, obtiene materias primas, maquinaria, tecnología o financiación de los proveedores, capta personas, compite con otras empresas y tiene como objetivo básico vender. 

Como sociedad debe cumplir con las distintas normas que fija la Administración, y para ello puede necesitar abogados, gestores, asesores fiscales, financieros y demás. En caso de sociedades familiares abiertas puede que tenga que buscar accionistas externos a la familia. Todos ellos, mediante una trama de relaciones, forman parte del entorno de la empresa y, al mismo tiempo, lo van conformando.

Tampoco la familia puede permanecer aislada del entorno; compra productos y servicios de todo tipo, comparte la educación de los hijos con el sistema educativo, necesita las atenciones de los sistemas sanitarios, tiene obligaciones fiscales, devociones religiosas, aficiones deportivas o culturales y, además, sus miembros más jóvenes deberán salir de la frontera familiar para encontrar pareja y crear, a su vez, un nuevo sistema familiar.

Con tantas interacciones, es lógico que el entorno sea dinámico, que los valores vayan evolucionando y, en consecuencia, que un proceso largo como la sucesión tenga poco que ver con las que llevaron a cabo anteriores generaciones, más aún si tomamos en consideración que estamos ante un cambio precisamente generacional. Así, las exigencias y condiciones del relevo del abuelo empresario por su hijo tendrán poco parecido con las que deberá afrontar éste a la hora de traspasar la empresa a sus hijos, ya en pleno siglo XXI.

En conclusión.  Las condiciones en las que el fundador emprendió el negocio son totalmente distintas al momento de iniciar una sucesión.  El relevo se estará encontrando con variables y condiciones muy distintas y esto deberá considerarse como un factor importante en el proceso de sucesión.

Es muy importante para las empresas familiares contar con un asesor que ayude antes que cualquier otra cosa, a conciliar los intereses y clarificar la visión en un ambiente cordial y de excelente comunicación que propicie una sucesión exitosa.


COMENTARIOS

Esta publicación aún no tiene comentarios disponibles.

Escribe un comentario.