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El Complejo de Jonás. ¿Lo has padecido?
El Complejo de Jonás. ¿Lo has padecido?
La mayoría de los psicólogos y mercadólogos conocen quien es Abraham Maslow y su teoría sobre las necesidades humanas, donde habla sobre la autorrealización y el éxito personal.
Abraham Maslow es un psicólogo estadounidense conocido como uno de los fundadores y principales exponentes de la psicología humanista, una corriente psicológica que postula la existencia de una tendencia humana básica hacia la salud mental; la que se manifestaría como una serie de procesos de búsqueda de auto actualización y autorrealización.
El desarrollo teórico más conocido de Maslow es la pirámide de las necesidades, modelo que plantea una jerarquía de las necesidades humanas, en la que la satisfacción de las necesidades más básicas o subordinadas da lugar a la generación sucesiva de necesidades más altas o superordinadas. Sin embargo según Maslow, únicamente aquellas necesidades no satisfechas generan una alteración en la conducta ya que una necesidad suplida no genera por si misma ningún efecto.
Explicando esta pirámide en la base se encuentran las necesidades fisiológicas humanas (respirar, comer, beber agua, dormir, evitar el dolor, vestirse).
En un siguiente nivel se ubican las necesidades de seguridad y protección (seguridad física, salud, seguridad económica, auto, casa).
El tercer nivel hacia arriba corresponde a las necesidades sociales (familia, pareja, amigos, escuela, club, aceptación social).
El nivel siguiente es el de las necesidades de reconocimiento. Maslow divide en estima alta a las necesidades de respeto a uno mismo e incluye sentimientos tales como confianza, competencia, logros, independencia y libertad. La estima baja concierne al respeto de las demás personas: el aprecio, reconocimiento, reputación, estatus, dignidad, fama, e incluso dominio. El tener satisfecha esta necesidad apoya el sentido de vida y la valoración como individuo y profesional.
En la cúspide de la pirámide se encuentra la autorrealización, la necesidad de ser. Es la necesidad más elevada del ser humano. Se llega a ésta necesidad cuando todos los niveles anteriores han sido alcanzados y completados, o al menos hasta cierto punto.
El Complejo de Jonás
Regresando al tema de nuestros miedos al éxito. Abraham Maslow postuló la existencia de una condición psicológica inherente al ser humano, que sabotea sus sueños de grandeza y lo relega a vivir en la mediocridad y el conformismo. Llamó a esta condición Complejo de Jonás.
Tomado del personaje bíblico Jonás que trató de huir del destino que Dios había decretado contra él.
Dios le pidió a Jonás que vaya al pueblo de Nínive, pero Jonás desobedece y se esconde en un barco que va en dirección opuesta. De pronto se desata una tormenta y los marineros ya habían caído en desesperación. Entonces Jonás dice a los marineros que lo echen al mar para que Dios detuviera la tormenta. Y en efecto, Jonás es arrojado a la tormenta y vino la mar en calma.
Estando Jonás en el mar, éste es tragado por una enorme ballena. Cuenta la historia que Jonás permaneció con vida en el vientre de la ballena y tres días después es vomitado luego de haber orado a Dios. Finalmente pudo llegar a Nínive para cumplir su misión.
En complemento al tema, Matina Horner, también psicóloga americana. Habló por primera vez del miedo al éxito, poniendo en relieve que las mujeres experimentan más miedo al éxito que los hombres. De acuerdo a esta psicóloga el éxito trae consecuencias no tan gratificantes como la pérdida de amistades, pérdida de feminidad y este miedo inhibe el motivo de logro. En nuestros días esta condición afecta de alguna manera tanto a hombres como mujeres.
El mayor problema para muchas personas es que el miedo al éxito es en gran parte inconsciente y de igual forma les impide salir de la zona de confort.
El hecho de no ser capaces de realizar este salto de fe para anular nuestras dudas, es lo que conduce al miedo al éxito. En muchos casos, vamos a crear medios para esquivar o reducir nuestro propio éxito.
¿Cómo saber si tienes el complejo de Jonás?
Si experimenta los siguientes pensamientos o miedos, es posible que tengas un temor al éxito en algún nivel:
- Te sientes culpable por cualquier éxito que tengas, no importa cuán pequeño sea, debido a que tus amigos, familiares o compañeros de trabajo no han tenido el mismo éxito. Crees que esto es humildad, pero no lo es.
- No hablas de tus logros con otras personas.
- Evitas o pospones los grandes proyectos, especialmente los que podrían conducirte al reconocimiento personal. Puedes creer que esto se deriva de un miedo al fracaso, pero muy probable que sea lo contrario.
- Con frecuencia comprometes tus propios objetivos para evitar conflictos en la familia u otras personas. Es posible que no tengas ninguna evidencia de que realmente podría causar problemas, pero te convences de lo contrario.
- Te sientes, inconscientemente, que no mereces disfrutar de éxito en tu vida.
- Crees que si alcanzas el éxito, no serás capaz de sostenerlo. Así que piensas, "¿por qué preocuparse?”
Estrategias para la superación de este miedo
- Sé realista en tu forma de pensar sobre el futuro. Adopta una visión realista de lo que sucederá si realmente tienes éxito con tu objetivo. No te fijes en tus temores o expectativas negativas sobre lo que va a pasar.
- Utiliza tus experiencias anteriores. Es probable que hayas tenido éxito en el pasado en alguna faceta de tu vida, ¿por qué no usar esta experiencia para cambiar sutilmente las expectativas actuales?
- Haz un plan para cuando logres el éxito. Crea escenarios posibles en el caso de tener un éxito y cómo sería tu comportamiento con tu pareja, tu familia, tus amigos.
- Tal vez el problema sea de la otra persona y no tuyo. A veces hay personas que reaccionan negativamente ante el éxito de otros, sobre todo si piensan que ahora tienes mucho más éxito que en el pasado. Puede que se trate de personas con una mentalidad algo limitada y envidiosa, que no saben o no pueden gozar del éxito de sus amigos o familiares. No dejes que tus amigos o compañeros de trabajo te detengan.
Vive intensamente AQUÍ Y AHORA (A&A). Esa última puerta que piensas no necesitar abrir porque ya has abierto muchas es el síndrome de Jonas. Si vivo A&A. a cada minuto abro puertas por que eso es vivir, sin darle tanta importancia que solo es producto del ego por lo logrado. Siempre hay una puerta o halgo por lograr cuando nos detenemos a evaluar lo logrado. A&A es vivir sin el lastre de ayer y sin el deseo de mañana. Heres un triunfador de ayer y mañana cuando vives intensamente el HOY.
