¿Por qué no tengo dinero? Aquí la respuesta.

¿Por qué no tengo dinero? Aquí la respuesta.

 
En definición el dinero es un medio de intercambio para pagar bienes y servicios, es una unidad de medida que permite comparar los precios y es un activo financiero que se puede invertir, ahorrar o prestar.

Desde la antigüedad y hasta nuestro tiempo el dinero ha sido motivo de juicios, prejuicios y hasta canciones, de quien lo tiene y quién no. Casi como la eterna lucha entre el bien y el mal.

"No tengo dinero ni nada que dar”. Juan Gabriel
"Con dinero y si dinero, pero sigo siendo el rey”. José Alfredo Jiménez

Estas son 10 sentencias que seguramente has escuchado o te han pasado por la mente. No son más que creencias limitantes: 

1. La gente rica es mala, mejor pobre pero honrado
2. El dinero no es la vida, es tan solo vanidad
3. El dinero no da la felicidad
4. El dinero es el diablo
5. Tener dinero te da problemas
6. Hay que trabajar duro para tener dinero
7. De dónde sacó el dinero, seguro lo robó
8. Va ser el más rico del cementerio
9. Los ricos no van al cielo
10. Más vale tener poco, con temor a Dios, que muchas riquezas con grandes angustias.

Las creencias limitantes son una percepción de la realidad que nos impide crecer, desarrollarnos como personas o alcanzar todas esas cosas que nos hacen ilusión. Es algo que realmente no es cierto pero que como si lo es para nuestra mente y eso es lo que vale para nosotros, lo damos por bueno.

¿Por qué no tengo dinero?

Una de las percepciones y sentimientos que más nos agobian es la falta de dinero. De hecho la mayoría de las personas al recibir nuestros ingresos nos dedicamos primero a pagar y cumplir con todos los compromisos que hemos adquirido: pagar tarjeta de crédito, los gastos de la casa, colegiaturas, mantenimiento del auto, tiendas departamentales y si nos queda la salida familiar.

Esta percepción se hace realidad simplemente por este hecho. Primero pagamos a los demás y si nos queda saldo qué bueno.

¿Y qué hago?

El cambio de paradigma para tener dinero es muy simple, pero requiere determinación para vencernos a nosotros mismos. A qué me refiero:

Cuando recibas tu ingreso. Antes de pagarle a los demás, págate a ti. Es decir, toma un porcentaje de tu dinero, el que definas y sepáralo del resto.  Ahora sí, ya no podrás decir que no tienes dinero.

¿Y los compromisos? 

Haz un plan para ajustarte a tu saldo. Los primeros 3 meses serán batallas contra el peor enemigo que tenemos: nosotros mismos. Pero lograrás el ajuste de tu flujo.

¿Qué hacer con tu dinero?

Define un sistema de ahorro de largo plazo con protección y con tasas de interés garantizadas. Y lo más importante. Haz la pregunta: ¿Qué puedo hacer para obtener más ingresos con el trabajo que tengo en este momento?

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