El Tiempo (III). Calidad de Vida y Tiempo de Calidad

El Tiempo (III). Calidad de Vida y Tiempo de Calidad

 
¿Amas a la vida? Pues si amas la vida no malgastes el tiempo, porque el tiempo es el bien del que está hecha la vida. Benjamín Franklin

La humanidad vive hoy una evidente contradicción. Es desesperante ver cómo acabamos con la tierra, pero tenemos la disculpa de que la naturaleza vive fuera de nosotros, en cambio nuestro tiempo solo existe para nosotros y mientras estemos vivos.
El Progreso está destruyendo a la naturaleza, al usar de manera irreflexiva sus recursos, como si tuviéramos otro planeta disponible, pero también ha hecho lo mismo con el tiempo, malgastarlo como si fuera ilimitado.
Pero veamos de manera práctica y simple con un ejemplo:
El dinero que tenemos en el banco procede de nuestro tiempo de trabajo. 
Si compramos una buena lancha que cueste digamos $ 600,000 y tenemos ingresos de $200,000 al mes quiere decir que mi lancha nos costó tres meses de vida, y si gastamos en marina, mantenimiento, seguros, marinero otros $ 200,000 al año y esto sin contar el tiempo que le dedicamos para llevarla, traerla, ver que se repare, etc. Pues ya invertimos otro mes de vida, pero sí solo la utilizamos 20 veces al año quiere decir que cada vez que la usamos nos costó 6 días de vida.
  • Atesoramos lo que ya no tiene valor. Tenemos nuestras casas llenas de libros que no se leyeron, bicicletas y aparatos de ejercicio que no usamos, vajillas y cubiertos que usamos dos veces al año, ropa que nos pusimos una vez, y tenemos que construir o rentar bodegas para guardar cosas que realmente no nos sirven, pero que nos cuestan días de vida.
  • Retorno de Inversión de Tiempo. Calculamos costos, intereses, cuanto pagaré al mes, pero ¿Cuándo nos preguntamos Cuánto tiempo de vida me costará, Y CUÁNTA CALIDAD DE VIDA ME DARÁ?
  • Ahorro o pérdida de tiempo. Como no hay tiempo para comprar los ingredientes de calidad y a fuego lento preparar una deliciosa cena, para "ahorrar tiempo” pedimos pizzas o comida rápida, nada sana ni realmente sabrosa. Ciertamente "ahorramos” tiempo pero perdemos el placer de vivir.
  • Nuestros amigos y el tiempo. Nos reunimos con nuestros amigos en fiestas ruidosas y la plática se reduce a gritos para poder ser escuchados y a temas triviales e intrascendentes, así tenemos la sensación de que tenemos muchos amigos, pero realmente no sabemos quiénes son, cuál es su vida, sus reflexiones. ¿Cuándo nos damos el lujo de reunirnos uno a uno o dos a dos?

Si sacamos cuentas: dormimos siete horas; comidas, dos horas; asearnos y vestirnos, una hora; trabajamos ocho horas más una de transporte, nueve horas; por lo tanto nos quedan cinco horas para la vida en familia, lectura, hacer deporte, hacer el amor, pero nos faltaban las tres horas promedio al día que el mexicano ve televisión, EN REALIDAD NUESTRO TIEMPO DISPONIBLE NO REBASARÁ LAS DOS HORAS POR DÍA.
Nuestro tiempo lo dedicamos a una gran cantidad de "placeres”, en vez de concentrarnos en los que realmente nos convienen.
Algunas conclusiones: 
  • Solo podremos beneficiarnos del tiempo si aprendemos a utilizarlo 
  • El tiempo tiene un precio
  • El tiempo es el centro de todo porque marca el ritmo de nuestra vida
  • Somos los únicos responsables de la calidad de nuestro tiempo.
En nuestro afán precipitado de hacer más cosas no hacemos nada a fondo, obsesionados por el cuánto y el cómo nos mantenemos distantes del porqué.


COMENTARIOS

Esta publicación aún no tiene comentarios disponibles.

Escribe un comentario.